Estos fandangos fueron publicados en julio de 2003 en el Programa de
FANDANGOS ZAMBREÑOS
(Dedicados a todas y a todos los aficionados
de
Yo soy de Zambra, señores,
por si lo quieren saber
(yo soy de Zambra, señores),
tierra antigua y de valer
que mana en aguas y amores
claros con brillos de miel.
La cruz en el campanario,
la media luna en la torre
(y la cruz en el campanario)
son testigos de su nombre
y su historia es un rosario
de esperanzas y sudores.
Tengo un molino y un huerto
a la orillita del río
(tengo un molino y un huerto),
donde muelo y donde crío
granos de oro que son versos
y cantes que son tallos finos.
Mientras saciaba mi sed
en la fuente “Los Mellizos”
(mientras saciaba mi sed)
tu cara me hizo un guiño,
yo ya no quise beber
por no romper aquel hechizo.
Volvíamos de la feria
por el Camino del Duende
(volvíamos de la feria)
con los últimos cohetes,
tú te pusiste muy seria
cuando te besé en la frente…
Y en la alberca “El Cigarrón”
ya llegando al Portugal
(en la alberca “El Cigarrón”)
nos volvimos a besar,
tu cara la iluminó
la luz de una palma real.
A torear la vaquilla
yo aprendí desde chicuelo
(a torear la vaquilla),
yo no le temo a sus cuernos:
Más cornadas da la vida
a quien la torea a cuerpo.
Mi mare a mares lloraba,
mi padre se despedía
y yo que los observaba
pregunté con rebeldía:
¿Dónde está
que huérfano a mí me cría?
Que la venero y la nombro:
Zambra, pueblo de albañiles,
que levantó con sus hombros
grandes obras y por miles,
“pa” que ahora los escombros
nos los traigan en desfile.
(Los de la contribución),
como sigan apretando
los de la contribución,
“via” cogerme cuatro trastos
y a la cueva “Nicanor”
me mudo por unos años.
Cuando pasa por la “Ová”
mi señor El Nazareno,
cuando pasa por la “Ová”,
doliente pero sereno,
se esconde el amo del mal,
tiembla el cielo y el terreno.
Rezo a mi Virgen de Gracia
bailando su pasodoble,
rezo a mi Virgen de Gracia,
le pido que nos endoble
la alegría y la esperanza,
y nuestros pecados borre.
Mi mare se llama Carmen,
mi Virgen “Llena de Gracia”,
mi mare se llama Carmen;
y a mi hija Carmen Gracia
no sabíamos que ponerle
cuando fuimos a bautizarla.
Tú que eres Gracia y Poesía,
Virgen Santa y Venerable,
tú que eres Gracia y Poesía,
te llames como te llames,
llámanos a la armonía,
líbranos de los desmanes.
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