Recojo aquí una serie de media docena de sonetos alejandrinos que escribí en el verano de 2006 y que presenté, una vez más, a un concurso, esta vez de humor... no hubo suerte para variar, pero bueno yo me divertí, espero que tú te "rediviertas" con ellos.
AMOR MORDISCO VERDE
(Declaración de amante promiscuo)
Os amo a todas, muchachas de curvas sinuosas,
porque sois las verdades turgentes de la tierra;
os amo porque en vuestras faldas prietas se encierra
la entraña de la vida creciente y milagrosa.
Adoro desnudaros, rendidas y obsequiosas,
hacer trizas con mimos y con besos las telas
ceñidas que atesoran vuestra más tierna esencia:
vuestros cándidos huesos de médulas jugosas.
En vuestro amor sucumbe mi lengua ávida y fofa,
y es delicia prohibida la orgía, el zarangollo
verriondo en que me inhumo y disfruto como un cerdo.
Lechugas refinadas, verdinas alcachofas,
coliflores, lombardas, seáis coles o repollos…
¿Os han mordido amores como yo os amo y muerdo?
AMOR JAMÓN
(Declaración de amante jampón)
Jamás, como ahora gimo, gemí de amor tan dulce,
mis ojos de codicia sonámbula en atraco,
baba y jadeo mi boca lasciva de verraco,
como ahora que ante mí, yaces desnuda y de bruces.
Jamás juré sin par devoción, pasión sin cruces,
jaleo y aflicción del ser maganto y flaco,
como ahora que te juro con ansias de jabato
que me hechizan tus nalgas y tus morros me abducen.
¿Que será de mis hijos, mi mujer si me fugo
contigo a los jardines colgantes de bellotas?
¡Me matarás de enjundia, cebón y mantecoso!
Cerda de mis tocinos, princesa de Jabugo,
¡que me cubran con una roja manta de lonjas
finas de tus sensuales andares perni…ociosos!
AMOR DESMESURADO
(Confesión de amante directo)
Me esperabas y llego y mi presencia te enciende,
lo noto y te levanto la falda sin contienda,
te me abres y penetro, resuelto entre tus piernas,
muriendo en tus vestidos abrazos… ¡tan calientes!
Mejor no te desnudes, no sea que de repente
rompamos el hechizo febril de la adherencia…
que no acabe este orgasmo perenne en la turgencia
encarnada que emerge del fondo de tu vientre.
Me dormiré cual recién nacido en tu regazo
soñando con limones y ascuas de mantequilla;
despiértame a la aurora, mi amor, si vivo acaso…
Sufrida mesa estufa, gentil mesa camilla,
me salve o me condene… ¡Que el cielo está aquí abajo,
colgando fleco a fleco en tus mansas enagüillas!
AMOR MORTÍFERO
(Aviso para amor no consentido)
Me buscas, ignorando la fe con que te huyo,
insistes en el bronco cortejo con que asedias
mis carnes delicadas y entecas entre medias
caricias de uñas largas que me urgen a ser tuyo.
No sé porqué porfías, candonga en el arrullo
y el esmerado tacto sutil con que me apremias,
pues cuanto más me palpas más crece en mí la astenia,
y el asco que me brota silencia tu murmullo.
La yerras si me crees muñequito de almíbar
y que puedes ganarme como al buen don Antonio
con tu juego volante, sensual y lujurioso.
¡Amante chupadora, a ver cómo ahora esquivas
la ley de la palmeta!... ¡Díptera del demonio
me has hecho un asesino convicto y alevoso!
“Vosotras, moscas vulgares,
me evocáis todas las cosas”
ANTONIO MACHADO
AMOL MELOCOTÓN
(Diálogo de amor meridional)
─ Anoche tuve un sueño, mi amol, maravilloso;
fue dulce sensación que, extraña y placentera,
me hizo arder en miríadas de chispas y de estrellas
en viaje sideral por el cosmos jubiloso.
Era a la vez flotar en el más alto gozo
con los sentidos llenos y las carnes abiertas;
y fundirse en el núcleo candente de la tierra
derretido en arroyos de espasmos extasiosos.
─ Ya veo que fue tu sueño dorada plenitud
donde te deleitaste; mas ¿me dirás, mi amol,
qué fue lo que soñaste en tamaña magnitud?
─ Soñé que era mi culo un dulce melocotón
jugoso y naranjado, mi amol, mientras que tú…
Tú te regocijabas… Sorbetón a sorbetón.
AMOR APREMIANTE
(Diálogo del amor oprimido)
Al entrar en la suite, ─¡Ea, ya llegó la noche!,
le dijo ella entregada, al esposo flamante.
─ Nunca quise sin firma ser tu hembra ni tu amante
y aguardé limpia y virgen el solemne descorche.
─Mas no sé qué me daba cuando al salir al porche
de la iglesia, entre lluvia de arroz ametrallante
me dijiste muy quedo, con susurro apremiante:
─Nena, ¡qué ganas tengo de que llegue la noche!
Y luego en la sesión de fotos y el convite
bufabas, suspirabas: ─¡Nena, me desbarato
porque anochezca y pueda…!, ¡diez veces repetiste…!
Y él, rojo y sudoroso, le dice con recato
de ternura inocente, de asombro y despiste:
─ Cariño… ¿A ti también te apretaban los zapatos?
Hola, José:
ResponderEliminarGracias por traerme aquí de tu mano, dejándome el enlace en mi blog, para venir a conocer tus poemas, la verdad es que me he llevado una grata sorpresa al ver que también escribes versos, a esos amores prohibidos jajajaja, o no consentidos, o confesiones de amantes jajajaaj unos amores terrenales muy suculentos y exquisitos, ya ya veo jajajaja, que tienes un excelente humor, me ha encantado descubrir tu blog, e iré, poco a poco descubriendo más de tus letras, veo que eres un genio en leetras, te felicito.
Mil gracias por tu simpatía, personas como tú tan positivas, en estos tiempos no hay muchas.
Un beso.
Repasando esta entrada por comentarios recientes, me topo con el tuyo, María, que me levanta el ánimo carnal y espiritual a la vez. Veo que sigues muy viva y viviendo a tope y me alegro y te felicito a mi vez porque tu blog sigue siendo una preciosidad estimulante. Aunque se me cruzan tantos cables, hago intención de entrar de vez en cuando a disfrutar de él. Gracias y que la vida te sea propicia. Un abrazo.
EliminarNo se podría haber dicho de mejor manera, muy buena descripción María de la fecunda producción de nuestro amigo José. Felicidades compañero.
ResponderEliminarHola Juan Diego, aunque sea año y medio después te agradezco la visita... A ver si nos visitamos de verdad con lo cerca que estamos. Un abrazo.
EliminarCon humor y con mucho ingenio nos describes estos amores terrenales y sencillos.!Me ha encantado volver a leerlos y escucharlos! Gracias por querer compartirlos.
ResponderEliminarHola Quisca, también hace año y medio ¡Como pasa el tiempo! Espero que este año te esté yendo mejor que el pasado. A ver cuando coincidimos. Un abrazo para ti y para Pascual.
EliminarEstupendos y sabrosos.En cuanto tengas unas habitas, aparezco por el Nacimiento.
ResponderEliminarPues recuérdame que eras "el abanico de la Ñ" porque ahora mismo no caigo...
EliminarJajajajajajaaaa, gracias José por estos alejandrinos eróticos-chistosos, que he disfrutao cantidad. Aparte del que pusiste en P.A.A. me ha encantao "El amor mortífero" y el Amor desmesurado". Buen fin de semana con mucho humor.
ResponderEliminarAbrazos
Carmen es un honor que una poeta flamenca hecha y derecha como tú me visite. Me alegro de que te gusten... Estamos en contacto. Iré visitando tus blogs poco a poco. Un fuerte abrazo y ya te he dicho lo que sintonizo con lo que haces.
EliminarTe sobra ingenio y humor, que derrochas sin tregua en este juego de Sonetos...un abrazo desde azpeitia
ResponderEliminarGracias por la visita y el elogio, amigo Azpeitia, viniendo de alguien a quien no le falta de lo mismo es doble la satisfacción. Un abrazo.
ResponderEliminarAquí te dejo mi sonrisa después de haber leído tus jocosos sonetos, amigo Puerto.
ResponderEliminarUn abrazo.